No confíes en dietas que prometen perder 20 kilos en un mes
Adelgazar o perder kilos es el deseo de un gran porcentaje de la población, no solo española sino en todo el mundo. Pese a esta realidad, es necesario destacar que no es saludable perder 20 kilos en un mes y mucho menos bajo métodos de alto riesgo para el bienestar de las personas. Es por ello, que durante este encuentro te contaremos las consecuencias de perder dicha cantidad de peso en un mes.
Desde La dieta no dieta nos hemos enfocado en informar y guiar a cada uno de nuestros usuarios en la consumición responsable de alimentos y hoy no existe una excepción. Por ello, si deseas perder peso de forma segura y ya has meditado opciones, estás en el lugar correcto.
¿Es posible perder 20kg en un mes?
Para lograr perder 20kg en un mes es necesario acudir a dietas rápidas, las cuales han sido muy criticadas a lo largo del tiempo por los especialistas en nutrición. De forma directa no es saludable perder esa cantidad de peso en un mes, por tanto, esta acción supone un claro riesgo para quienes la asuman.
Realmente es imposible mencionar todos los tipos de dietas que podrían ser peligrosas, aun así, podríamos hablar sobre algunas como aquellas que se basan en un solo alimento. De hecho, todas las que implican un bajo consumo calórico brusco son peligrosas para el bienestar de las personas. También se encuentran aquellas que invitan al ayuno permanente o las dietas hiperproteicas.
Por ello, al recurrir a dietas es crucial contar con fuentes especializadas y nutricionistas, de esta manera podrás evitar los resultados contraproducentes.
Consecuencias de perder 20 kg en un mes
Tal y como adelantamos las consecuencias de perder 20 kg o más en un mes son múltiples, además de muy peligrosas para el bienestar de las personas. Para probar esta afirmación te contamos algunos de los resultados que podrías tener tras hacer una dieta rápida:
1. Fatiga crónica
Cuando el cuerpo no consume los nutrientes necesarios es común que las funciones del organismo no rindan de forma correcta. Este mal funcionamiento se traduce a múltiples sensaciones negativas como el cansancio y fatiga. Además, dicha fatiga se debe a que el sistema nervioso parasimpático intenta mantener reservas y consume menos energía, lo que lleva a la aparición del sueño o cansancio injustificable.
2. Deshidratación
La mayoría de las dietas milagrosas que afirman la pérdida de 20 kilogramos en un mes se basan en la pérdida de líquidos. Aunque esta actividad podría dar la sensación de pérdida de volumen y peso, dicha actividad supone un riesgo evidente de deshidratación. En este sentido es necesario tomar en consideración que el principal componente de la sangre es el agua.
Cuando falta agua en la sangre esta se espesa y como consecuencia aumenta el riesgo de sufrir problemas renales o cardiovasculares. De hecho, se puede originar una bajada de tensión arterial sin obviar los problemas en la regulación de la temperatura corporal.
3. Alteraciones en el humor
Cuando se enfrenta un cansancio constante y alteraciones en el sueño, además del hastío que producen las dietas restrictivas, se generarán con gran probabilidad cambios continuos de humor. De hecho, se podrían evidenciar episodios de abatimiento e irascibilidad.
4. Debilitamiento de los huesos
La falta de nutrientes de estas dietas no solo afecta el estado anímico de las personas o la consistencia de la sangre, sino también la masa ósea. Es decir, la mala alimentación debilita los huesos y favorece la posibilidad de una fractura, fisura o esguince.
5. Riesgo de lesiones musculares
Pese a que está en la posición cinco, realmente las afecciones que hemos mencionado no poseen un orden de prioridad sino de existencia. En este sentido las lesiones musculares pueden ser las más comunes al perder peso rápidamente, ya que se hace a costa de la masa muscular. Es por ello que los músculos se debilitan y quedan propensos a lesiones serias tras una actividad física.
6. Efecto rebote o yo-yo
Aunque la pérdida de peso es algo real, lo peor de este tipo de dietas rápidas no solo recae en las afecciones físicas, sino que el cometido se termina por revertir. El efecto rebote o yo-yo hace referencia a la recuperación del peso perdido de forma rápida una vez la dieta se abandona.
7. Trastornos de alimentación
También podría ser considerado como uno de los riesgos más relevantes, ya que para perder 20 kilos en un mes las personas podrían caer en anorexia o bulimia.
¿Cómo te podemos ayudar desde La dieta no dieta?
Ahora que conoces que no es posible ni saludable perder 20 kilos en un mes es necesario optar por otros métodos alimenticios para lograr una pérdida de peso considerable de forma consciente. Un ejemplo de ello recae en una dieta balanceada y en la consumición de deliciosas recetas pensadas en una mejor calidad de vida.
Por ejemplo, puedes realizar la compra de nuestra guía nutricional en E-Book, de donde podrás obtener todas las pautas que allí te brindamos dándote todos los conocimientos para comer bien. Con nosotros no encontrarás fórmulas mágicas porque no existen, de hecho, no te pondremos ninguna dieta, sino simplemente un cambio estratégico en la elección de tus alimentos.
Nuestro método se basa en comer más de lo que debes y menos o casi nada de lo que no. De esta manera eliminamos la ingesta de los alimentos que te hacen engordar. Incluso, con la compra de nuestra guía obtendrás un mes de consulta online por email.